Enfermería de urgencias y atención crítica

Yosmairy Carvajal Martínez
Licenciada en enfermería
Maestría en salud pública

La enfermería moderna la define como la especialidad que se obtiene mediante estudios de postgrado, esta especialización de la enfermería enseña a manejar situaciones críticas en pacientes complicados, a la continuidad de la atención personalizada al paciente en emergencias y en las unidades de cuidados intensivos.

Las enfermeras de Urgencias y Atención Crítica son fundamentales en la gestión de situaciones médicas complejas, brindando atención especializada y apoyo vital en unidades de cuidados intensivos y urgencias. Su papel abarca desde la monitorización de pacientes hasta la coordinación de equipos multidisciplinarios,bcontribuyendo significativamente a la calidad y seguridad del cuidado del paciente en entornos críticos.

Los protocolos de atención en enfermería de urgencias y cuidados críticos son fundamentales para garantizar una atención efectiva y segura a los pacientes. Estos protocolos suelen incluir pautas específicas para el manejo de diferentes situaciones, como la reanimación cardiopulmonar, la administración de medicamentos de alto riesgo, la evaluación inicial del paciente, entre otros.

Por ejemplo, en situaciones de paro cardiaco, se siguen protocolos como el algoritmo de la American Heart Association que guía la secuencia de acciones para la resucitación cardiopulmonar. Además, existen protocolos para el manejo de emergencias respiratorias, trauma, accidente cerebrovascular, entre otras condiciones críticas.

La implementación de estos protocolos requiere entrenamiento constante del personal de enfermería, coordinación efectiva con otros profesionales de la salud y actualización periódica para incorporar las últimas evidencias científicas y mejores prácticas clínicas.

Enfermería en las unidades de cuidados intensivos (UCI) 

En las unidades de cuidados intensivos (UCI), el personal de enfermería desempeña un papel crucial en la atención y supervisión de pacientes críticamente enfermos las 24 horas del día. Su labor incluye desde la monitorización continua de signos vitales, administración de medicamentos, asistencia en procedimientos médicos, manejo de equipos de soporte vital y comunicación efectiva con pacientes y familiares para brindar apoyo emocional y educación sobre el cuidado. Además colaboran estrechamente con médicos y otros profesionales de la salud para garantizar un cuidado integral y oportuno, siendo pilares clave en la recuperación y estabilidad de los pacientes en situaciones críticas.

El personal de enfermería especializado en la atención de pacientes críticos es un profesional que ha adquirido conocimientos, habilidades, actitudes y valores para proporcionar cuidados de calidad a los pacientes en estado crítico. Al finalizar la especialidad serán capaces de:

Recibir y atender a pacientes críticos en todas las etapas de su vida.

• Realizar la valoración del paciente.

• Planificar los cuidados de enfermería.

• Aplicar tratamientos farmacológicos y vigilar la respuesta del paciente.

• Evaluar las intervenciones de enfermería y sus resultados.

• Utilizar la evidencia científica para la toma de decisiones en el cuidado de enfermería.

• Establecer una comunicación eficaz con el equipo de salud, con el paciente y su familia.

• Trabajar en equipo de forma interdisciplinar

• Planificar acciones educativas para colegas y familias.

• Participar de equipos de investigación.

• Asumir las tareas del cuidado de la salud siguiendo un compromiso ético con el paciente.

En los cuidados intensivos, el personal de enfermería utiliza una variedad de tecnologías para monitorizar, mantener y mejorar la salud de los pacientes críticamente enfermos. Algunas de estas tecnologías incluyen:

1. Monitores de signos vitales: Estos dispositivos monitorizan constantemente la presión arterial, la frecuencia cardíaca, la frecuencia respiratoria, la saturación de oxígeno y, en algunos casos, la temperatura del paciente. Proporcionan información en tiempo real sobre la condición del paciente y alertan al personal en caso de

cambios significativos.

2. Ventiladores mecánicos: Los ventiladores mecánicos proporcionan soporte respiratorio a los pacientes que tienen dificultad para respirar por sí mismos. El personal de enfermería se encarga de ajustar los parámetros del ventilador según las necesidades del paciente y de monitorizar su respuesta al tratamiento.

3. Bombas de infusión: Estas bombas se utilizan para administrar con precisión medicamentos, líquidos intravenosos y nutrientes a los pacientes. El personal de enfermería programa la velocidad y la dosis de infusión según las indicaciones médicas y monitoriza la administración de manera continua.

4. Sistemas de monitorización hemodinámica: Estos sistemas permiten monitorizar la función cardíaca y la presión sanguínea de manera más precisa, a menudo a través de catéteres colocados en el corazón o grandes vasos sanguíneos. El personal de enfermería interpreta los datos obtenidos y colabora con el equipo médico para ajustar el tratamiento según sea necesario.

5. Bombas de perfusión de medicamentos: En los casos en que se requiera administrar medicamentos vaso-activos o sedantes de manera continua y precisa, se utilizan bombas de perfusión que permiten la administración controlada de estos medicamentos. El personal de enfermería es responsable de la programación y monitorización de estas bombas. Además de estas tecnologías, el personal de enfermería en cuidados intensivos también utiliza equipos como sondas vesicales, sondas nasogástricas, dispositivos para el control de la glucosa, dispositivos para el control de la temperatura, entre otros, según las necesidades específicas de cada paciente. Es fundamental que el personal de enfermería esté capacitado en el uso adecuado de estas tecnologías y sea capaz de proporcionar cuidados seguros y efectivos a los pacientes críticamente enfermos.

Enfermería en la emergencia 

En las emergencias, las enfermeras son la primera línea de respuesta, proporcionando atención inmediata y crucial a los pacientes en momentos críticos. Su papel abarca desde la evaluación inicial y estabilización de pacientes hasta la coordinación de equipos de atención multidisciplinarios. Las enfermeras en emergencias están capacitadas para tomar decisiones rápidas y precisas, administrar tratamientos urgentes, realizar procedimientos médicos, como la reanimación cardiopulmonar, y manejar situaciones de alto estrés con calma y profesionalismo. Además, ofrecen apoyo emocional a pacientes y familiares, siendo un vínculo vital entre ellos y el equipo médico. Su dedicación y experiencia son fundamentales para salvar vidas y garantizar la mejor atención posible en situaciones de emergencia.

El manejo de situaciones de emergencia en enfermería de urgencias y cuidados críticos implica una respuesta rápida, eficiente y coordinada para estabilizar al paciente y proporcionar el tratamiento necesario. Algunas de las situaciones de emergencia más comunes incluyen paro cardiaco, insuficiencia respiratoria aguda, shock, trauma grave, accidente cerebrovascular, entre otras.

El proceso de manejo de una situación de emergencia suele seguir un enfoque sistemático que incluye los siguientes pasos:

1. Evaluación inicial: Los profesionales de enfermería evalúan rápidamente al paciente para identificar la gravedad de la situación y determinar las intervenciones necesarias.
2. Priorización de acciones: Se establecen prioridades basadas en la estabilidad del paciente y la urgencia de las intervenciones. Por ejemplo, se prioriza la vía aérea en casos de insuficiencia respiratoria aguda o el control de la hemorragia en casos de trauma grave.
3. Implementación de intervenciones: Se realizan las intervenciones necesarias para estabilizar al paciente, como la administración de oxígeno, la colocación de accesos venosos, la monitorización continua de signos vitales, entre otras.
4. Coordinación del equipo: Se trabaja en equipo con otros profesionales de la salud, como médicos, paramédicos y técnicos, para garantizar una atención integral y coordinada.
5. Comunicación: Se mantiene una comunicación clara y efectiva con el equipo de salud, así como con el paciente y sus familiares, para proporcionar información sobre el estado del paciente y el plan de tratamiento.
6. Evaluación continua: Se realiza una evaluación continua del paciente para monitorizar su respuesta al tratamiento y realizar ajustes según sea necesario.

Conclusiones

En conclusión podemos ver cómo la enfermería de urgencias y cuidados críticos desempeña un papel vital en la atención de pacientes que se encuentran en situaciones críticas o de emergencia. La capacitación continua, la colaboración interdisciplinaria y el enfoque centrado en el paciente son clave para proporcionar cuidados seguros y efectivos. Además, la efectiva comunicación entre el paciente que puede comunicarse, los familiares y el equipo de trabajo de la unidades son claves para la mejora del paciente.

Exhortarles a todos los profesionales de enfermería mantener una constante comunicación en las entregas de las unidades para así poder dar continuidad a las soluciones, mantener actualización de las estrategias y avances sobre urgencias y cuidados al paciente crítico.